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jueves, 5 de marzo de 2020

Cómo cambiar tu personalidad


Cómo cambiar tu personalidad

¿Qué me hace ser como soy, como y cuando se formó mi personalidad, es posible modificarla? 

Todos podemos cambiar nuestra personalidad.
Todos podemos cambiar algún aspecto de nuestra personalidad, pero, ¿por qué debería cambiarla, cómo puedo saber si necesito un cambio?; si yo me siento de lo más normal.
La necesidad de un cambio es algo difícil de determinar, pues por más que las personas cercanas a nosotros nos digan que no estamos bien, que necesitamos modificar algo, sentimos que están exagerando y que, como todos,  tenemos algunas áreas de oportunidad, pero no estamos tan mal como ellos piensan, aunque también deberíamos aceptar que posiblemente tengan algo de razón, y probablemente si necesitamos un cambio; pero, para ser objetivos, y no basarnos solo en opiniones, podemos evaluar los resultados que hemos obtenido a lo largo de la vida, analizar si estamos inconformes con algún aspecto de nuestra conducta, si normalmente reaccionamos de manera negativa ante situaciones que están fuera de nuestro control, si tenemos conflictos con la mayoría de las personas con quienes tratamos, si constantemente estamos de malas, o deprimidos; si es así, y realmente queremos mejorarlo, lo siguiente es determinar que aspecto de un cambio.

La reconstrucción o modificación de la personalidad es algo muy serio e importante, muy pocas personas poseen una personalidad magnética y atrayente, la mayoría no nos distinguimos de los demás, no sobresalimos, somos normales. Ante las situaciones diarias de la vida, la personalidad nos hace actuar como somos, extrovertidos, introvertidos, neuróticos, preocupados, alegres, tristes, confiados; hay tantas personalidades como seres humanos hay en el mundo, cada uno de nosotros posee una serie de características que combinadas, nos hacen únicos y forman nuestra personalidad. La personalidad reside en la mente, si pudiéramos modificar las experiencias grabadas en ella podríamos modificar a voluntad nuestra conducta y personalidad.

Nuestra personalidad es lo que nos distingue de los demás, lo que la gente aprecia de nosotros, es un conjunto de factores, que combinados con el aspecto físico nos identifican como la persona que somos. 
Todos hemos conocido algunas de esas pocas personas con una personalidad que atrae; llaman la atención con su apariencia, su voz, o su manera de comportarse; alguien puede decir que tienen carisma; que son líderes naturales, que tienen suerte, o dinero, o que es por la posición que ocupan, pero lo cierto es que las experiencias, y las creencias grabadas en su mente les han permitido desarrollar ese tipo de personalidad; hacen las cosas con una pasión que atrae, no tienen miedo en actuar ni en mostrar sus emociones ante los demás, dan su máximo esfuerzo en cualquier situación, siempre utilizan todas sus habilidades y experiencia para desempeñarse de la mejor manera posible; le dan color a la vida.

La base de nuestra personalidad se forma principalmente durante 3 etapas de nuestra vida; durante la concepción, donde recibimos todas las características genéticas de nuestros padres; en la niñez, especialmente los primeros 5 años; donde el condicionamiento que recibimos por nuestra familia, amigos y maestros se va integrando a ella; y durante la adolescencia, en la que los cambios físicos, emocionales y hormonales influyen tanto en nuestro estado de ánimo como en la conformación definitiva de nuestra personalidad; al terminar la adolescencia los cambios son mínimos y van a depender en gran medida del impacto que pudieran tener las nuevas experiencias que enfrentemos en la vida.

Componentes de la personalidad
Físico, el aspecto que la gente que no te conoce aprecia a primera vista de ti; la conformación de tu cuerpo, el tono de tu voz, tu pelo, tus ojos, tu sonrisa, tu postura, tus expresiones corporales, tu salud física, la ropa y accesorios que utilizas.

Mental, el relacionados a la adquisición de cultura y conocimientos, la forma en que razonas y formas juicios lógicos, tu inteligencia, la creatividad que muestras encontrando soluciones a los problemas; tus creencias y tu forma de pensar

Emocional, la forma como controlas y expresas tus emociones, el entusiasmo, el amor, los rencores, las penas, las alegrías; el uso que puedes hacer ellas para motivarte y lograr tus objetivos, aún en situaciones difíciles.

Moral-Espiritual, tus valores y creencias, la claridad sobre tu propósito en la vida y la forma como utilizas tus capacidades para construir un mundo mejor.

Metas-Objetivos, son tus necesidades, tus intereses y deseos, representados en metas y objetivos bien claros que quieres alcanzar, la forma en que estos se vinculan con tu propósito de vida, las situaciones que te impulsan y te motivan en tus actividades diarias.

Social, son las habilidades que utilizas en tus relaciones diarias, el saludo, la forma de estrechar la mano, tu adaptabilidad, la tolerancia a las ideas de los demás, el respeto a sus derechos, los vínculos existentes con las personas con quienes te relacionas, la fuerza de estas relaciones, el interés que pones en ellas.

Si ya tenemos una personalidad desarrollada, ¿Cómo podemos modificarla y mejorarla?
Existen varios métodos para mejorarla; casi todos ellos se enfocan en modificar alguno de los aspectos que la integran, utilizando procesos como el Coaching, la PNL, la sugestión, y la visualización mental. Todos ellos tienen algo en común, trabajan sobre el aspecto mental; y se basan en el hecho de que nuestra mente no distingue entre una situación real de una imaginada en todos sus detalles.

El Coaching es la fase de análisis y evaluación, donde, a través de preguntas, la persona que desea modificar su personalidad, identifica aquellos aspectos que le impiden desarrollar su máximo potencial

En la siguiente fase, que corresponde a la modificación de aquellos aspectos identificados, se utilizan procesos de PNL, sugestión y visualización mental, para la aplicación de estos métodos, buscamos un lugar tranquilo, nos recostamos y relajamos nuestro cuerpo y mente; posteriormente imaginamos, con todo detalle, la conducta que deseamos adquirir; debemos visualizarnos como si ya la tuviéramos; actuando en nuestro ambiente normal y comportándonos de acuerdo al cambio que deseamos; esto empezará a grabar una nueva conducta en las redes neuronales de nuestro cerebro; la modificación en nuestra personalidad se notará después de 3 semanas de repetir este proceso. 

A partir de ese momento, ante cualquier situación que se nos presente, nuestra mente, de manera automática, acudirá a nuestros bancos de memoria donde ya se encuentra la información que hemos visualizado y almacenado previamente; la recupera y la utiliza para provocar una respuesta.






Debemos desarrollar el potencial con el que nacimos; no permitir que nuestras capacidades duerman, perfeccionarlas al máximo y utilizarlas para nuestro beneficio y el de los demás y así, construir un mundo mejor para todos.


¡Despierta... libera tu potencial!



martes, 1 de octubre de 2019

Descubre lo que te motiva

Descubre lo que te motiva

"La creatividad simplemente consiste en conectar cosas"
(Steve Jobs)

Todos podemos ser creativos, solo es cuestión de tener la actitud adecuada; confiar en que encontraremos las respuestas a cualquier problema que se nos presente y, sobre todo, de alimentar nuestra mente con la mayor cantidad posible de conocimientos, esto significa asegurarnos de llevar a nuestra mente información y conocimientos en los más diversos temas; a mayor cantidad de información, más sencillo será el proceso para encontrar soluciones creativas; de otra manera; ¿Cómo podrías conectar cosas si antes no las conoces, si no sabes que existen?

No existe la ausencia total de creatividad; en algún momento de nuestra vida todos aplicamos el pensamiento creativo en mayor o menor medida, solo que, como ya mencionamos, el nivel de creatividad y el número de ideas que llegamos a desarrollar siempre van a estar limitadas por la cantidad de conocimientos e información que almacenamos en nuestras redes neuronales; si aseguramos esto, potencialmente estaremos en condiciones de generar ideas creativas ante cualquier problema que se nos presente; después de esto, lo único que necesitaríamos es encontrar la chispa que encienda a voluntad nuestro proceso creativo, los motores que impulsarán a nuestra mente en la búsqueda de ideas diferentes; entre estos recursos están, la necesidad, el lenguaje, las emociones y la actividad física.

La necesidad
Las necesidades son propias de todo organismo vivo y consisten en una sensación de carencia provocada por la falta algo ya sea a nivel físico, mental o emocional; se trata de uno de los componentes fundamentales en la vida, la necesidad es la que lleva a que los seres vivos se movilicen en busca de aquello que requieren; por ejemplo, la sed, el frío, el hambre, un logro, un afecto, el poder, la realización personal; un árbol que ante una sequía extiende sus raíces para llegar más profundo, donde está el agua, actúa en base a una necesidad, del mismo modo que los elefantes viajan durante varios días en busca de agua.

La necesidad surge cuando aparece un impulso imposible de controlar que nos lleva a que las actividades y esfuerzos que realizamos se encaminen en cierta dirección con el fin de satisfacerlo.

Muchas de nuestras necesidades son solo de tipo mental y no son necesidades reales como tal, sino deseos. Nuestras necesidades varían con la edad y con las características propias de cada persona, y en muchos casos es difícil diferenciar entre las cosas que creemos necesitar y lo que verdaderamente nos hace falta; debemos reflexionar para identificar aquello que necesitamos y lo que hemos sido inducidos a creer que necesitamos por las campañas de marketing, que trabajan para estimular y provocarnos necesidades, o por la influencia y condicionamiento de las personas con quienes convivimos.

Cuando se trata de satisfacer una necesidad, nuestra mente no distingue si se trata de una necesidad real o imaginario; funciona de la misma manera, siempre encaminará nuestras acciones a buscar satisfacer tal necesidad. Así que si queremos tener ideas creativas, debemos crearnos una necesidad.

El Lenguaje
Las palabras que utilizamos, el uso que hacemos del lenguaje al momento de plantear los problemas es muy importante en el proceso creativo, ya que mediante él podemos incrementar la posibilidad de encontrar la solución requerida.
En el planteamiento que hacemos de un problema, en las palabras y la forma en que lo fraseamos, con un sentido positivo o negativo, podemos encontrar parte de la solución; en este sentido, el lenguaje se convierte en una herramienta estratégica al buscar soluciones creativas; por ejemplo si decimos “nunca voy a salir de esta situación económica”; esto anula toda posibilidad de encontrar una solución; pero si decimos, “creo que necesito conseguir un buen trabajo, ahorrar un poco en los gastos que tengo, y no darme tantos lujos”; esta forma de plantearlo nos está indicando ya una idea sobre la forma en que vamos a solucionar el problema. ¿Cuál es nuestra reacción, o la de los demás, ante la forma en que planteamos los problemas; como nos sentimos?, si los planteamos de manera negativa nosotros mismos estamos suponiendo una situación difícil en la que no podemos encontrar la solución; “siento que algo no va bien en mi vida, no sé qué hacer”; “no me gusta mi trabajo, no puedo encontrar algo mejor”, “las relaciones con mi pareja cada vez van peor, no entiendo que estoy haciendo mal”, “es imposible trabajar contigo, vamos directo al desastre”; este tipo de situaciones, planteadas en términos negativos, bloquean desde el inicio la posibilidad de encontrar soluciones; por el contrario, si los planteamos en forma positiva, estamos suponiendo que la solución ya existe y lo único que debemos hacer es encontrarla; “algunas cosas no salen como yo lo esperaba, tardaré un poco más, pero sé que llegaré al objetivo deseado”, “algunas actividades de mi trabajo no me gustan, pero por algo existen, voy a buscar la forma de encontrarles sentido dentro de todo el proceso”, “algunas veces mi pareja y yo nos molestamos, pero estoy seguro que mejorando nuestra comunicación saldremos adelante ante cualquier problema”, “algunas cosas no están resultando como se esperaba, si nos apegamos al manual de procesos los resultados mejorarán”. Cuando planteamos las situaciones de esta manera, también es muy importante que incluyamos la meta precisa a la que queremos llegar; debe ser tan clara y objetiva como sea posible. Por ejemplo, cosas muy precisas como, “debemos ganar el premio de calidad”; “necesitamos que el 96% de nuestros clientes nos califiquen como un servicio”; como mencionábamos, otro punto muy importante es que nuestro lenguaje esté cargado de posibilidades; que se hable de situaciones que son viables; esto nos da más probabilidades de solución. Si queremos tener ideas creativas, utilicemos un lenguaje positivo.


La actividad física
Según un estudio de la Universidad de Stanford, las caminatas pueden ayudar a mejorar notablemente la creatividad; en este estudio se analizó el pensamiento de más de 170 personas, se dieron cuenta de que la producción de ideas creativas aumentó un 60% cuando caminaban y este incremento en la creatividad se mantuvo durante los siguientes minutos después de terminar la caminata. Esta situación no es algo nuevo; si se tienen conocimientos básicos sobre la forma en que funciona el cuerpo humano; cuando una persona realiza alguna actividad física, especialmente aquellas de tipo aeróbico, el cuerpo requiere mayor de energía; para esto necesita incrementar la cantidad de oxígeno que reciben las células a través de la sangre para ayudarlas a transformar las calorías en la energía que requieren, también se fuerza al corazón a latir con mayor fuerza y velocidad; una mayor cantidad de oxígeno y de nutrientes son enviados a las células de nuestro cuerpo, incluyendo a las neuronas, a través de la sangre, esto hace que nuestro cuerpo funcionen de una manera más efectiva, además durante el ejercicio físico, algunas glándulas de nuestro cuerpo segregan hormonas que nos causan un estado temporal de euforia, todo esto combinado hace que nuestras neuronas también funcionen a un ritmo mayor facilitando el proceso de generación de ideas creativas. Si queremos tener ideas creativas, realicemos alguna actividad física.

Las emociones
¿Qué define los actos de nuestra vida; todo aquello que hacemos está basado solo en nuestra experiencia y habilidades, o en nuestras emociones; en cómo nos sentimos? Los estados de ánimo, siempre se han considerado como un gran impulsor de la creatividad pues siempre se ha pensado que un estado de ánimo adecuado incrementa la capacidad de producir ideas creativas y de influir en nuestra conducta. 
La principal característica entre las personas emprendedoras, con un alto nivel de creatividad y que logran generar cambios con sus ideas, es que tienen una motivación tan fuerte que les impulsa a pensar en el futuro y en cómo llegar a él lo más pronto posible; emocionalmente hablando, tienen una pasión que les quema por dentro y los obliga a actuar con un rumbo determinado.
¿Cómo se relaciona la creatividad con las emociones?
No se puede dudar que las emociones tienen un gran efecto sobre nuestra conducta, y especialmente sobre el proceso creativo; sentimientos como el amor filial, el amor de pareja, o el amor fraternal, nos llevan a actuar sin descanso en una dirección determinada; las emociones son el motor que nos impulsa a buscar nuevas ideas; todo tipo de emociones, inclusive el odio, pueden ser canalizadas y utilizadas para lograr todo aquello que deseamos.
Las emociones modifican nuestros estados de ánimo, hacen que nuestro cuerpo produzca dopamina y noradrenalina, hormonas que tienen una influencia directa sobre forma en que funciona nuestra mente; hacen que la información sea procesada con mayor velocidad y flexibilidad, incrementan el acceso a nuestra memoria de largo plazo, lo que nos lleva a tener mayor fluidez de ideas. Así que si deseamos ser innovadores y creativos, utilicemos nuestras emociones.

Si deseamos que la creatividad se convierta en algo natural en nosotros, debemos proporcionarle a nuestra mente la mayor cantidad y variedad de conocimientos posibles

¡Libera tu potencial!



miércoles, 18 de noviembre de 2015

Los motores de la creatividad (Creatividad Vll)

Los motores de la Creatividad

"La creatividad simplemente consiste en conectar cosas"
(Steve Jobs)

Todos podemos ser creativos, solo es cuestión de tener la actitud adecuada; confiar en que encontraremos las respuestas a cualquier problema que se nos presente y, sobre todo, de alimentar nuestra mente con la mayor cantidad posible de conocimientos, esto significa asegurarnos de llevar a nuestra mente información y conocimientos en los más diversos temas; a mayor cantidad de información, más sencillo será el proceso para encontrar soluciones creativas; de otra manera; ¿Cómo podrías conectar cosas si antes no las conoces, si no sabes que existen?

No existe la ausencia total de creatividad; en algún momento de nuestra vida todos aplicamos el pensamiento creativo en mayor o menor medida, solo que, como ya mencionamos, el nivel de creatividad y el número de ideas que llegamos a desarrollar siempre van a estar limitadas por la cantidad de conocimientos e información que almacenamos en nuestras redes neuronales; si aseguramos esto, potencialmente estaremos en condiciones de generar ideas creativas ante cualquier problema que se nos presente; después de esto, lo único que necesitaríamos es encontrar la chispa que encienda a voluntad nuestro proceso creativo, los motores que impulsarán a nuestra mente en la búsqueda de ideas diferentes; entre estos recursos están, la necesidad, el lenguaje, las emociones y la actividad física.

La necesidad
Las necesidades son propias de todo organismo vivo y consisten en una sensación de carencia provocada por la falta algo ya sea a nivel físico, mental o emocional; se trata de uno de los componentes fundamentales en la vida, la necesidad es la que lleva a que los seres vivos se movilicen en busca de aquello que requieren; por ejemplo, la sed, el frío, el hambre, un logro, un afecto, el poder, la realización personal; un árbol que ante una sequía extiende sus raíces para llegar más profundo, donde está el agua, actúa en base a una necesidad, del mismo modo que los elefantes viajan durante varios días en busca de agua.

La necesidad surge cuando aparece un impulso imposible de controlar que nos lleva a que las actividades y esfuerzos que realizamos se encaminen en cierta dirección con el fin de satisfacerlo.

Muchas de nuestras necesidades son solo de tipo mental y no son necesidades reales como tal, sino deseos. Nuestras necesidades varían con la edad y con las características propias de cada persona, y en muchos casos es difícil diferenciar entre las cosas que creemos necesitar y lo que verdaderamente nos hace falta; debemos reflexionar para identificar aquello que necesitamos y lo que hemos sido inducidos a creer que necesitamos por las campañas de marketing, que trabajan para estimular y provocarnos necesidades, o por la influencia y condicionamiento de las personas con quienes convivimos.

Cuando se trata de satisfacer una necesidad, nuestra mente no distingue si se trata de una necesidad real o imaginario; funciona de la misma manera, siempre encaminará nuestras acciones a buscar satisfacer tal necesidad.
Así que si queremos tener ideas creativas, debemos crearnos una necesidad.
El Lenguaje
Las palabras que utilizamos, el uso que hacemos del lenguaje al momento de plantear los problemas es muy importante en el proceso creativo, ya que mediante él podemos incrementar la posibilidad de encontrar la solución requerida.
En el planteamiento que hacemos de un problema, en las palabras y la forma en que lo fraseamos, con un sentido positivo o negativo, podemos encontrar parte de la solución; en este sentido, el lenguaje se convierte en una herramienta estratégica al buscar soluciones creativas; por ejemplo si decimos “nunca voy a salir de esta situación económica”; esto anula toda posibilidad de encontrar una solución; pero si decimos, “creo que necesito conseguir un buen trabajo, ahorrar un poco en los gastos que tengo, y no darme tantos lujos”; esta forma de plantearlo nos está indicando ya una idea sobre la forma en que vamos a solucionar el problema. ¿Cuál es nuestra reacción, o la de los demás, ante la forma en que planteamos los problemas; como nos sentimos?, si los planteamos de manera negativa nosotros mismos estamos suponiendo una situación difícil en la que no podemos encontrar la solución; “siento que algo no va bien en mi vida, no sé qué hacer”; “no me gusta mi trabajo, no puedo encontrar algo mejor”, “las relaciones con mi pareja cada vez van peor, no entiendo que estoy haciendo mal”, “es imposible trabajar contigo, vamos directo al desastre”; este tipo de situaciones, planteadas en términos negativos, bloquean desde el inicio la posibilidad de encontrar soluciones; por el contrario, si los planteamos en forma positiva, estamos suponiendo que la solución ya existe y lo único que debemos hacer es encontrarla; “algunas cosas no salen como yo lo esperaba, tardaré un poco más, pero sé que llegaré al objetivo deseado”, “algunas actividades de mi trabajo no me gustan, pero por algo existen, voy a buscar la forma de encontrarles sentido dentro de todo el proceso”, “algunas veces mi pareja y yo nos molestamos, pero estoy seguro que mejorando nuestra comunicación saldremos adelante ante cualquier problema”, “algunas cosas no están resultando como se esperaba, si nos apegamos al manual de procesos los resultados mejorarán”. Cuando planteamos las situaciones de esta manera, también es muy importante que incluyamos la meta precisa a la que queremos llegar; debe ser tan clara y objetiva como sea posible. Por ejemplo, cosas muy precisas como, “debemos ganar el premio de calidad”; “necesitamos que el 96% de nuestros clientes nos califiquen como un servicio”; como mencionábamos, otro punto muy importante es que nuestro lenguaje esté cargado de posibilidades; que se hable de situaciones que son viables; esto nos da más probabilidades de solución.
Si queremos tener ideas creativas, utilicemos un lenguaje positivo.
La actividad física
Según un estudio de la Universidad de Stanford, las caminatas pueden ayudar a mejorar notablemente la creatividad; en este estudio se analizó el pensamiento de más de 170 personas, se dieron cuenta de que la producción de ideas creativas aumentó un 60% cuando caminaban y este incremento en la creatividad se mantuvo durante los siguientes minutos después de terminar la caminata. Esta situación no es algo nuevo; si se tienen conocimientos básicos sobre la forma en que funciona el cuerpo humano; cuando una persona realiza alguna actividad física, especialmente aquellas de tipo aeróbico, el cuerpo requiere mayor de energía; para esto necesita incrementar la cantidad de oxígeno que reciben las células a través de la sangre para ayudarlas a transformar las calorías en la energía que requieren, también se fuerza al corazón a latir con mayor fuerza y velocidad; una mayor cantidad de oxígeno y de nutrientes son enviados a las células de nuestro cuerpo, incluyendo a las neuronas, a través de la sangre, esto hace que nuestro cuerpo funcionen de una manera más efectiva, además durante el ejercicio físico, algunas glándulas de nuestro cuerpo segregan hormonas que nos causan un estado temporal de euforia, todo esto combinado hace que nuestras neuronas también funcionen a un ritmo mayor facilitando el proceso de generación de ideas creativas.
Si queremos tener ideas creativas, realicemos alguna actividad física.

Las emociones
¿Qué define los actos de nuestra vida; todo aquello que hacemos está basado solo en nuestra experiencia y habilidades, o en nuestras emociones; en cómo nos sentimos? Los estados de ánimo, siempre se han considerado como un gran impulsor de la creatividad pues siempre se ha pensado que un estado de ánimo adecuado incrementa la capacidad de producir ideas creativas y de influir en nuestra conducta. 
La principal característica entre las personas emprendedoras, con un alto nivel de creatividad y que logran generar cambios con sus ideas, es que tienen una motivación tan fuerte que les impulsa a pensar en el futuro y en cómo llegar a él lo más pronto posible; emocionalmente hablando, tienen una pasión que les quema por dentro y los obliga a actuar con un rumbo determinado.
¿Cómo se relaciona la creatividad con las emociones?
No se puede dudar que las emociones tienen un gran efecto sobre nuestra conducta, y especialmente sobre el proceso creativo; sentimientos como el amor filial, el amor de pareja, o el amor fraternal, nos llevan a actuar sin descanso en una dirección determinada; las emociones son el motor que nos impulsa a buscar nuevas ideas; todo tipo de emociones, inclusive el odio, pueden ser canalizadas y utilizadas para lograr todo aquello que deseamos.
Las emociones modifican nuestros estados de ánimo, hacen que nuestro cuerpo produzca dopamina y noradrenalina, hormonas que tienen una influencia directa sobre forma en que funciona nuestra mente; hacen que la información sea procesada con mayor velocidad y flexibilidad, incrementan el acceso a nuestra memoria de largo plazo, lo que nos lleva a tener mayor fluidez de ideas.
Así que si deseamos ser innovadores y creativos, utilicemos nuestras emociones.
Si deseamos que la creatividad se convierta en algo natural en nosotros, debemos proporcionarle a nuestra mente la mayor cantidad y variedad de conocimientos posibles
¡Despierta... libera tu potencial, trabaja en tu mente!

miércoles, 11 de marzo de 2015

Profecía autocumplida


Logrando una actitud mental positiva

Tú decides como ver la vida
Si pensamos,  y confiamos en que podemos lograr algo, estamos en lo cierto, si creemos que no, ¡también!, esta situación es conocida como profecía auto-cumplida, o efecto Pigmalión y está íntimamente relacionada con la fe, el pensamiento positivo y la ley de la atracción; nuestras creencias y expectativas hacen realidad nuestros deseos, pero también pueden materializar nuestros miedos; la buena noticia es que pueden ser modificadas y utilizadas a nuestro favor para lograr nuestras metas y objetivos.
Podemos aprender cómo conseguirlo…, pero lo más importante es tener la fe suficiente; tener la firme convicción de que podemos lograrlo. ¿Cuántas veces nos hemos encontrado ante situaciones como las siguientes?:

“Todo me sale mal, sé que no voy a conseguir ese trabajo, es una empresa muy importante; lo voy a intentar, pero estoy seguro que me dirán que no”. “Necesito perder peso, pero no puedo, todos me dicen que me ejercite para mejorar mi forma física y mental, pero sé perfectamente que eso no funcionará conmigo porque ya lo he intentado varias veces sin ningún resultado”. “Nada funciona bien en mi vida, parece que todo y todos están en mi contra, debo una gran cantidad en mi tarjeta de crédito y no puedo conseguir el dinero para pagarlo”. Cada vez que nos encontramos pensando o diciendo alguna frase como las anteriores, podemos estar seguros de algo; si existía la más mínima oportunidad de que los resultados fueran favorables, lo más seguro es que, con esa actitud mental, tal oportunidad haya desaparecido; ¿por qué perder la fe en nosotros mismos; por qué no confiar en que dentro de nosotros tenemos lo necesario par lograr todo lo que nos propongamos? 

Si pensamos, nos expresamos y actuamos de esa forma tan negativa, sin fe en nuestras capacidades, podemos estar seguros de que no conseguiremos nada de lo que deseamos, a pesar de que exista una clara posibilidad de lograrlo; y la única persona que puede eliminar toda esa carga de negatividad y modificar los resultados no deseados de nuestra vida, somos nosotros mismos.

¿Cómo hacer para quitar la negatividad de nuestra vida?
Lo más importante que podemos hacer para conseguirlo, es comenzar a crear una tendencia de fe o de pensamiento positivo ante cada situación negativa que se nos presenta; primero debemos aceptar que lo que pensemos y esperemos, es lo que sucederá; nuestros pensamientos y creencias son muchísimo más importantes de lo que podemos llegar a creer, y es posible que, por sí solos, sean un factor determinante para el logro de nuestros objetivos.

Podemos observar y darnos cuenta que tener expectativas y pensamientos negativos sobre la vida en general, es algo muy grave, pues no se puede lograr casi nada sin tener ideas, pensamientos y expectativas favorables; cualquier cosa que deseamos lograr, desde un nuevo trabajo, hasta perder peso o ganar estabilidad financiera, dependerá mucho de nuestras convicciones para lograr el éxito y realizar esos sueños; nuestros pensamientos, positivos o negativos, tarde o temprano se convertirán en acciones. Desde el mismo momento en que creemos y pensamos si podremos hacer o no algo, tomaremos la acción de intentarlo o no, y si ni siquiera lo intentamos, será imposible que lo logremos, con lo cual se cumplirá la profecía auto-realizada.

El mundo y la vida actual no son justos, y los problemas que nos toca enfrentar no son nada fácil, los condicionamientos negativos y las malas experiencias que sufrimos nos moldean, nos roban la fe y nos hacen ver la vida de una forma incorrecta y no pocas personas terminamos viendo disminuida nuestra autoestima y perdiendo la confianza en nosotros mismos; cuando esto sucede, ya no creemos en nosotros mismos e incluso podemos experimentar la sensación de que no merecemos lograr ciertas cosas en la vida, de que no somos dignos de ellas, de que nos estamos hundiendo en un mar de problemas.

Lo primero que debemos hacer para romper esta forma de pensamiento, es justamente reconstruir nuestra fe y autoestima mediante la creencia en nosotros mismos; debemos creer en nuestras capacidades, en que internamente tenemos los recursos necesarios y que podemos lograr cualquier cosa que nos propongamos en la vida, con esto, muy probablemente generaremos la confianza suficiente como para intentar conseguirlo; esto nos ayudará a eliminar muchos de los pensamientos negativos, todo cambiará, y a medida que obtengamos algunos logros, tendremos más confianza para intentar otros mayores, y así sucesivamente; por eso, es necesario que, primero, generemos la suficiente confianza en nosotros mismos, y que hagamos hasta lo imposible por abandonar todos los pensamientos, creencias y acciones negativos que nos acompañan en la vida.

Pensemos positivamente, con la fe suficiente, sobre todo lo que deseamos hacer y vamos a obtener en la vida; desarrollemos una actitud de autoconfianza, una actitud en la que creamos que podremos conseguir cualquier cosa y, una vez que logremos esto, iniciemos acciones; iniciemos y mantengamos una tendencia de pensamiento positivo, y abandonemos toda la negatividad en la vida.

Otra cosa que podemos hacer e buscar rodearnos de gente con actitud positiva; nadie podrá animarnos a tener pensamientos positivos cuando las cosas salen un poco diferente a como esperábamos si todos los que están alrededor son negativos; no dejemos que las personas negativas nos contagien su estado de ánimo y su energía perjudicial.

Desarrollar y mantener una tendencia positiva de pensamiento no es algo que se da de un día para otro, se requiere algo de tiempo, pero una vez que nos decidamos a abandonar de una vez por todas los sentimientos perjudiciales en nuestra vida, y mantengamos una sana distancia con gente que no tenga más que pensamientos negativos, podremos lograr una transformación; nuestra personalidad sufrirá cambios positivos que nos llevarán a transformarnos en personas positivas, y empezaremos a lograr nuestros y sueños.

Cuando algo suceda en nuestra vida, sin importar lo que sea, no pensemos automáticamente en el lado negativo de tal situación, pensemos siempre en la parte positiva, practiquemos diariamente manteniendo pensamientos positivos y, eventualmente, estos se integrarán a nuestra forma de ser, se convertirán en una parte de nosotros.

Una vez que hayamos logrado eliminar la actitud mental negativa de nuestra vida, veremos cómo las cosas empiezan a cambiar, y como todo aquello que deseamos y merecemos, se hace realidad.


¡Cada uno de nosotros decide la forma de quiere ver la vida, de manera positiva, con fe en si mismo, llena de luz; o en tonos grises y obscuros, llena de negatividad y falta de confianza!

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viernes, 13 de febrero de 2015

Condicionamiento para el éxito

¿Estás conforme con lo que has obtenido de la vida hasta el día de hoy?


Los seres humanos (homo sapiens) hemos existido como tal por lo menos desde hace unos 250,000 años; esto significa la existencia de miles de generaciones antes de nosotros; generaciones que nos han heredado lo mejor de cada una de ellas; sus conocimientos y experiencias, sus éxitos, los problemas que enfrentaron para dominar y superar los diferentes obstáculos, los desafíos de la geografía y el clima; y nos heredaron también toda su creatividad aplicada para lograr sobrevivir y desarrollarse; para superar y domesticar a otras especies, para desarrollar la agricultura y la escritura, para dominar el fuego y crear las tecnologías necesarias para mejorar y hacer más fácil su existencia.
Podemos ver que, física y mentalmente hablando tenemos, en los genes de cada uno de nosotros, toda esta herencia; todas las capacidades que le han permitido a la especie humana alcanzar el nivel de desarrollo y civilización que tenemos actualmente; esto significa que ¡Estamos totalmente equipados para lograr el éxito!
Desde el momento de nuestro nacimiento, heredamos lo mejor de nuestros padres; y también recibimos la herencia de las  miles de generaciones de ancestros; ¡Estamos perfectamente equipados para lograr el éxito!
Genéticamente hablando, cada uno de nosotros representamos lo mejor y más evolucionado de nuestra especie; tenemos en nuestro interior toda la herencia genética recibida de las miles de generaciones que nos precedieron; no importa lo que nos diga nadie, no importa lo que nos hayan hecho creer, no importa lo que piensen los demás; no importa si estamos conscientes de ello o no; estamos totalmente equipados para el éxito; pero, de alguna forma toda esa capacidad genética, todo ese potencial que hemos heredado al nacer, ha sufrido un proceso de condicionamiento negativo que nos restringe y nos hace funcionar solo a un porcentaje mínimo de nuestra capacidad; este condicionamiento lo hemos recibido desde el momento en que nacimos; por nuestra familia, por nuestros amigos y, en muchas ocasiones, lo que es peor, por nosotros mismos.
Desde pequeños hemos sido condicionados por quienes nos rodean para comportarnos como lo hacemos; de acuerdo a lo que la sociedad considera como normal, bueno y aceptable; y esto se ha grabado con tanta fuerza en nuestra mente subconsciente, que se ha convertido en creencias, en costumbre, en hábitos y estos hábitos y creencias determinan en gran medida como va a ser nuestra conducta y cómo vamos a interpretar los hechos y a reaccionar ante las situaciones que se nos presentan en la vida diaria; y están tan enterrados en nuestro subconsciente, que los seguimos aceptando sin darnos cuenta, sin cuestionarlos y, en este gran proceso, a la vez, nosotros también condicionamos a otras personas, muchas veces de manera involuntaria, pensando en lo que creemos que es lo más conveniente para ellos.
Hemos aceptado este condicionamiento de manera inconsciente, necesitamos recapacitar, analizar y cuestionar cuáles de estas creencias nos limitan para utilizar al máximo toda la capacidad con la que hemos nacido; podríamos ser mucho más creativos y felices con un condicionamiento diferente, un condicionamiento que elimine estos frenos que nos bloquean y nos impiden avanzar en la vida con una mayor velocidad; sin estas creencias negativas que tenemos de nosotros mismos y de cómo son o deben ser las cosas.
El condicionamiento negativo limita nuestra creatividad y el logro de resultados
Así como hemos sido condicionados, muchas veces de manera negativa durante la infancia; cada uno de nosotros puede cambiar este condicionamiento en cualquier momento por uno más adecuado; uno que vaya de acuerdo a nuestros objetivos y necesidades, podemos, literalmente, reprogramar nuestra mente, nuestra forma de interpretar y reaccionar ante cualquier situación que se nos presente en la vida diaria; para hacerlo, primero hay que identificar aquellas creencias que nos limitan y nos impiden desarrollarnos al 100%; o identificar aquellas que nos impulsarán en nuestro desarrollo y logro de objetivos; después solo hay que seguir el mismo proceso a través del cual hemos sido condicionados para implantar en nuestro subconsciente las nuevas creencias; para esto podemos utilizar lo que se conoce como visualización mental, esto es imaginar nuevas experiencias en todos sus detalles hasta que llegan a formar parte de nosotros y se convierten en hábitos.
¿Cuáles son las creencias que me limitan? (físicas-mentales-sociales)
En la escuela, ¿Qué me impide ser el mejor?
En el trabajo,  ¿Qué necesito para desempeñarme al máximo?
Con mi familia y amigos, ¿Cuáles son las creencias que me limitan?

Para modificar las creencias limitantes, o implantar en el subconsciente una creencia positiva, podemos utilizar, además de la visualización, la autosugestión, el hipnotismo y la programación neurolingüística.

Mediante el condicionamiento podemos literalmente construir la personalidad que deseamos para lograr el éxito


 
¡Libera tu potencial…!

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