miércoles, 26 de marzo de 2014

¿Qué me limita?

¿Qué me limita?


¿Si físicamente no tengo limitación alguna; qué me impide lograr, de una manera sencilla, todo aquello que deseo, cuáles son los pensamientos o creencias que me impiden avanzar y lograr cada uno de mis objetivos..., que es lo que debo cambiar para lograrlo...?


Son preguntas que, igual que a casi todo el mundo, me hice en algún momento, he reflexionado en ellas con la mayor cantidad de detalle posible; soy libre, tengo total libertad para pensar, decir y hacer lo que deseo, de ir a donde yo quiera, y sobre todo, de lograr todo lo que me proponga, pero..., ¿es cierto, realmente soy tan libre para ejercer tal libertad sin influencia de ningún tipo?; ¿o mi comportamiento es determinado por creencias que de alguna forma han sido implantadas en mi mente por la publicidad, por las personas con quienes he convivido a través de los años...? 

Con el tiempo he concluido que es una combinación de varias situaciones; y buscando entre mis recuerdos me doy cuenta de que a lo largo de mi vida son muy diferentes las creencias que me han limitado para lograr todo aquello que he deseado...:

En mis primeros años, me condicionaba y me limitaba la autoridad de mis padres sobre lo que podía y no podía hacer; "no hagas esto, no hagas lo otro, pórtate bien, no hagas travesuras..."; también me limitaba el miedo que sentía cada vez que los veía salir, y nos dejaban en casa, al pensar en la posibilidad de que no regresaran; ¿Qué vamos a hacer, quien nos va a cuidar, que vamos a comer?; me limitaban los regaños y castigos que recibía sí hacía algo que no le pareciera a la dueña de la vecindad donde vivíamos y ésta se quejaba con mis padres

Recuerdo que me limitó especialmente, y durante mucho tiempo en mi vida, el desconsuelo de pensar que mi madre tenía predilección por uno de mis hermanos y que tal vez no me quería de la misma manera, no entendía que es algo normal sentirse identificado en mayor grado con algunas personas que con otras; inclusive dentro de la misma familia.

Me limitaban las opiniones de mis compañeros en la escuela; las bromas y burlas que en ocasiones me hacían me provocaban ser aún más introvertido, me limitaba el miedo a los bravucones de las pandillas callejeras, y que por el solo hecho de voltear a observarlos, o decir algo, fuera motivo de represalias, después; durante la adolescencia, me preocupaba y limitaba la carga que sentía al pensar en los esfuerzos que hacían mis padres para mantenernos a mí y a mis hermanos, me limitaba el hecho de que las muchachas de mi edad no se fijaran en mí, y tuvieran preferencia por otros.

Llegué a sentirme inferior a otros amigos por la razón de que eran menos introvertidos que yo; ellos expresaban con mayor libertad sus ideas y a mí me costaba trabajo; cuando inicié mi propia familia, me limitaba el miedo que sentía al pensar la posibilidad de no poder darles a mi esposa y a mis hijos, lo necesario, o incluso algo mejor a lo que yo había recibido de mis padres.

Constrúyete poco a poco
usa tu fuerza de voluntad
Son una gran cantidad de limitaciones, y una gran cantidad de tiempo desperdiciado en ellas, sin haber logrado desarrollar las habilidades necesarias para lograr un cambio; pero en el momento en que tome consciencia de esto; cada uno de estos aspectos de mi vida fueron superados uno a uno, mediante el coraje y la fuerza de voluntad al principio, y posteriormente mediante el razonamiento y la reflexión, pues como casi todas las cosas en la vida; y las situaciones que nos limitan no son la excepción, existe la dualidad, los opuestos, lo positivo y lo negativo, lo bueno y lo malo; y en ese sentido, los aspectos que me limitaron también fueron los mismos aspectos que me motivaron, que me dieron la energía para hacer todo lo necesario para evitar que se convirtieran en realidad.


Durante años se pensó que los 100 metros planos 
no podían correrse en menos de 10 segundos 
Ahora, con la experiencia y el aprendizaje que dan los años, me doy cuenta de que todas estas creencias solo fueron interpretaciones mías, nadie hizo algo con el único propósito de hacerme sentir mal o de perjudicarme, aún hoy, todavía siento que hay algunos aspectos que, en cierta medida, me siguen limitando, entre ellos, el miedo que tengo a que les suceda algo malo a mis hijos o a mi esposa, también me sigue limitando el sentido de competencia, pues todavía siento envidia cuando me entero de que algún amigo más joven que yo logra un éxito mayor al que considero haber obtenido; me comienza a limitar el miedo de pensar que a mi edad, esto ha sido todo; que lo que he logrado es lo máximo que puedo alcanzar, y que por más que me esfuerce ya no podré lograr nada más, de alguna forma me ha limitado, y todavía me sigue limitando la responsabilidad que siento por quienes dependen de mí, no puedo dejar de pensar que si hago, o dejo de hacer algo puedo perjudicar a alguien y esto me preocupa.

Estoy seguro de que existen algunas creencias más que me limitan y que es difícil identificarlas porque se encuentran escondidas en el subconsciente, en las experiencias de mis primeros años, pero también estoy seguro de que no son reales, que sólo están en mi mente, y que se originaron en la interpretación que hice de las cosas que me sucedieron, y sobre todo, estoy seguro que la solución para cualquier tipo de situaciones siempre la he tenido yo, que los límites de todo lo que puedo y lo que no puedo lograr, los establezco yo, a través de mis creencias y nadie más; ¡y que me van a limitar siempre y cuando yo lo permita!

Un límite solo es un obstáculo
que debe ser superado
Voy a seguir trabajando en comprender cómo funciona mi mente, en identificar cuáles son mis creencias, en reforzar aquellas que me impulsan y en eliminar las que me limitan mientras tenga la energía suficiente, voy a eliminar cada uno de los frenos mentales que me impiden desempeñarme al máximo en cada uno de los aspectos de mi vida.



¿Estás conforme con lo que has obtenido de la vida hasta el día de hoy; y si es así, estás consciente de que pudiste haber logrado mucho más?
¡Los límites solo existen cuando creemos en ellos!

¡Libera tu potencial...!



viernes, 14 de marzo de 2014

Mente y Programación Neuro Lingüística-PNL lll (Cómo funciona la mente-Xl)


“Sí creemos en lo que siempre hemos creído, entonces pensaremos en lo que siempre hemos pensado, y actuaremos como siempre hemos actuado, y por lo tanto, obtendremos los resultados que siempre hemos obtenido”; si deseamos cambiar y tener mejores resultados en la vida, primero debemos modificar nuestras creencias.

La Programación Neurolingüística o PNL, identifica los tipos de creencias y pensamientos de una persona con altos niveles de éxito en la vida para enseñarlos y replicarlos en otras personas. La PNL se basa en el estudio del subconsciente, el hipnotismo, la sugestión y el condicionamiento mental.

Principios de la PNL

La PNL establece algunos principios que se toman como guías de comportamiento en las diferentes situaciones en las que nos desempeñamos; estas guías no se deben tomar como una verdad absoluta o universal, solo son recursos que nos ayudarán a lograr nuestros objetivos, lograr el éxito, y a mejorar nuestras relaciones con los demás.

Considerar estos principios a la hora de tomar una decisión y utilizarlos como guías nos permitirá obtener el máximo provecho de las técnicas de la PNL.

1. El Mapa no es el Territorio, la realidad es percibida de diferente manera por cada persona, las creencias que adquirimos a través de la vida y el lenguaje que utilizamos constituyen los medios que usamos para describir y representar la realidad que percibimos.

Cada situación con la que nos enfrentamos en la vida diaria pasa por diversos filtros o creencias al momento de ser percibida, interpretada y almacenada en nuestra memoria, lo cual impide que la percibamos realmente como es; y por lo cual la misma situación tendrá significados diferentes para cada persona.

2. La mente y el cuerpo forman un mismo sistema, la mente y el cuerpo se caracterizan por interactuar como un circuito cibernético; ambos interactúan y se influyen entre sí al momento de buscar lograr un objetivo. Cualquier cambio en uno afecta de algún modo al otro, el cuidado que debemos tener con ellos y buen funcionamiento de ambos es importante en cualquier ser humano; debemos cuidar, alimentar y ejercitar ambos en la misma medida; los procesos mentales pueden influir sobre el funcionamiento del cuerpo y los procesos corporales causan también afectaciones en los procesos de la mente.

3. Todo comportamiento busca un beneficio, toda conducta que realizamos tiene como objetivo conseguir algún beneficio. La PNL separa la intención o propósito de la conducta; de igual modo, una persona no es su conducta, la conducta nos parece negativa cuando no conocemos el propósito. La PNL nos proporciona los medios para alcanzar nuestros objetivos, medios más eficaces que amplían nuestras opciones, sustituyendo las conductas limitadoras.

4. Todo comportamiento es útil dependiendo del contexto, cuando observamos un comportamiento propio o de alguna persona con la que interactuamos; para entenderlo, es necesario analizarlo a la luz del ambiente o contexto donde se desarrolla, ya que de otro modo tal comportamiento puede parecernos ilógico, irracional o fuera de lugar.

5. Todos tenemos potencialmente los recursos necesarios para cambiar y actuar eficientemente, desde el momento de nuestro nacimiento hemos acumulado experiencias y conocimientos, de los cuales podemos extraer los recursos necesarios para desarrollarnos como personas y afrontar con éxito cualquier situación que se nos presente.

6. Las respuestas que obtenemos dependen de nuestra comunicación, los resultados que obtenemos ante una situación tienen que ver con nuestra efectividad al expresarnos, e implica que tenemos que mejorar, ajustar y afinar nuestra comunicación para obtener las respuestas que deseamos, y no solamente suponer que la falla se encuentra en el receptor de nuestra comunicación.

7. Las personas respondemos a nuestro mapa de la realidad, las creencias que hemos adquirido, ciertas o no, funcionan como filtros o limitantes de nuestra percepción, solo podemos crear mapas de lo que consideramos la realidad en base a nuestras creencias. Todas nuestras respuestas y conductas ante cualquier situación se dan sobre la base de estos mapas que hemos formado en nuestra mente. Las creencias y las experiencias varían en cada persona, no existen dos seres humanos que tengamos los mismos mapas o modelos del mundo; cada uno creamos un modelo diferente, y por lo tanto, experimentaremos una realidad diferente.

Un mapa no es el territorio que representa, pero mientras más exacto es, tendrá una estructura semejante al territorio, lo cual será de mucha utilidad para guiarnos hacia donde queremos ir.

8. No existe mala comunicación, sólo retroalimentación, si la respuesta que obtenemos no es la esperada, debemos tomar tal respuesta solo como una información útil que nos proporciona la retroalimentación necesaria para modificar nuestra actuación y así conseguir los resultados que deseamos.

9. Si es posible para otros, es posible para mí, siempre es posible la identificación y creación de modelos eficaces que nos lleven directo al éxito y a lograr la excelencia. Si alguien tiene la capacidad de hacer algo y lograr el éxito; se puede observar su comportamiento, el vocabulario que utiliza, las ideas y creencias que tiene; y extraer el modelo o estrategias que utiliza y fundamentan se capacidad y enseñarlas a otras personas.

10. Procesamos la realidad a través de nuestra mente, por lo tanto somos nosotros los que construimos nuestras creencias a través de la interpretación que hacemos de nuestras experiencias y somos los únicos responsables por lo que esas experiencias provocan en nosotros; si nos sentimos preocupados por cualquier causa externa, esto no se debe a la situación en sí, sino a la interpretación que hacemos sobre ella; así pues, tenemos el poder de cambiarlo en cualquier momento.

11. Si algo no funciona, haz otra cosa, este principio se refiere a la flexibilidad que debemos tener para conseguir nuestros objetivos. Si constantemente comprobamos que los resultados obtenidos no son lo que esperamos, no debemos insistir en emplear los mismos medios, debemos probar con otros diferentes hasta lograr lo que nos hemos propuesto. Cada intento fallido no es un error, solo es el descubrimiento de una forma más de lo que no funciona en la búsqueda de nuestros objetivos.

Las Creencias y la PNL

Nuestro comportamiento, lo que logramos o dejamos de lograr en nuestras vidas están basados en nuestras creencias personales que, ciertas o no, cada uno de nosotros las consideramos como verdaderas y nuestro subconsciente las toma como guías que definen nuestra forma de reaccionar en las diversas situaciones en las que nos desempeñamos.

Desde nuestro mapa de la realidad, con los conocimientos adquiridos, aprendemos que mente y cuerpo forman un sistema que debemos cuidar, alimentar y ejercitar en la misma medida; que todos tenemos una intención positiva en lo que hacemos; que cuando se nos presente cualquier situación en la vida seleccionáremos la mejor opción para ese momento, debemos tener siempre en cuenta que si algo es posible para alguien, es posible también para nosotros; cuando las cosas no salgan como esperamos debemos considerarlo como experiencia, pues en la vida solo hay aprendizajes no errores; si algo no funciona debemos intentar otra cosa, todo lo que nos sucede en la vida tiene una razón de ser y tarde o temprano le encontramos el sentido y todos los actos que realizamos son de utilidad en nuestro contexto.

La construcción de un mundo mejor solo es posible liberando y utilizando nuestras capacidades para el beneficio común; y nuestra mente es la principal capacidad con la que contamos.

¿Estamos conformes con lo que hemos obtenido de la vida hasta el día de hoy; y si es así, estamos conscientes de que pudimos haber logrado mucho más?


¡Los límites solo existen cuando creemos en ellos!

¡Libera tu potencial, Trabaja en tu Mente!