viernes, 10 de enero de 2014

Sugestión Curativa

Sugestión para lograr una buena salud

Cualquiera que pueda ser la afección del sujeto, física o moral, es preciso proceder siempre de la misma manera y pronunciar las mismas palabras con algunas variantes, según los casos.
Diga al sujeto: “Siéntese y cierre los ojos.”
No trate de hacerlo dormir, es inútil.
"Le ruego cerrar simplemente los ojos, para que su atención no se distraiga en objetos que llegan a su campo visual"
Dígale ahora: “todas las palabras que le voy a pronunciar van a fijarse, imprimirse, grabarse, incrustarse, en su cerebro.  Es preciso que ellas queden fijadas, impresas, incrustadas.
Incluso si usted no quiere, o no sabe cómo, quedarán fijadas, de una forma totalmente inconsciente de su parte, su organismo y usted mismo deberán obedecer.”
Le digo en principio que, “todos los días, tres veces por día: a la mañana, a la tarde, a la noche; a la hora de las comidas, usted tendrá hambre, y se dirá: “comeré placenteramente” y en efecto, usted comerá con placer.  Tendrá cuidado en masticar, lentamente, sus alimentos tal que, los transforme en una especie de pasta blanda que, usted digerirá.  En estas condiciones usted digerirá bien y no sentirá dolor alguno.  La asimilación se hará bien y su organismo preferirá sus alimentos para hacer sangre, músculo, fuerza, energía, en una palabra; vida.  
Puesto que usted ha digerido bien, la función intestinal se cumplirá normalmente y todas las mañanas, al levantarse experimentará la necesidad de evacuar y, sin tener necesidad de utilizar medicamento alguno, sin recurrir a artificio alguno usted obtendrá un resultado satisfactorio.”
Además, “todas las noches, a partir del momento en que desee ir a dormir hasta el momento en que desee despertarse a la mañana siguiente, dormirá con un sueño profundo, calmo, tranquilo, durante el cual no tendrá pesadillas,   sueño al salir del cual, usted portará completa disposición de ánimo.  
De otra parte, a partir de ahora, si le llega el estar triste, derrumbado, fatigado, enojado, no será más así, y en lugar de estar triste, derrumbado, fatigado enojado, usted estará, alegre, es posible estar alegre, sin razón alguna, alegre incluso, así mismo como le llegaba estar triste sin razón alguna: le diré más; incluso aun teniendo verdaderas razones, razones reales, para estar aburrido y afligido, usted no lo estará. Si le llegan momentos de impaciencia, cólera,  usted no hará tales movimientos, no los tendrá más; por el contrario, estará siempre paciente,  siempre dueño de usted mismo y las cosas que le enojan,  se tornarán para usted, indiferentes y  entrará en calma, mucha calma. Si alguna vez es asaltado por el odio, seguido de ideas malsanas, temores, terrores, fobias, tentaciones, amarguras; yo deseo que todo eso frente a los ojos de su imaginación y poco a poco, se aleje de usted, y que eso parezca fundirse, perderse como en una nube lejana en la que todo debe terminar desapareciendo, completamente; como al despertar, se evapora un sueño.  Deseo que todos sus órganos funcionen bien: el corazón late formalmente, la circulación sanguínea se efectúa como ella debe efectuarse, los pulmones funcionan bien, el estómago, el intestino, el hígado, la vesícula biliar, los riñones, la vejiga, cumplen normalmente sus funciones. Si alguno entre ellos funciona de forma anómala, esta anomalía desaparece día a día, tal que en poco tiempo, habrá desaparecido completamente, y éste órgano habrá retomado su función normal. Además, si existe alguna lesión en alguno de ellos, estas lesiones se cicatrizan día a día, y ellas estarán rápidamente curadas.”
Para tal propósito, debo decir que; no es necesario saber qué órgano está enfermo para curarlo. Bajo la influencia de la autosugestión:
“todos los días, bajo todos los puntos de vista, voy de mejor en mejor”.
El inconsciente ejerce su acción sobre ese órgano, órgano que él mismo sabe identificar muy bien. Agregó incluso esto, y es una cosa muy importante:
"Si hasta el presente, usted ha experimentado una cierta desconfianza, le digo que esa desconfianza desaparecerá poco a poco, dejando en su lugar, al contrario, confianza en usted mismo, basada en esta fuerza de un incalculable poder, que está en cada uno de nosotros.”
Esta confianza es una cosa absolutamente indispensable en todo ser humano. Sin confianza en sí, no se llega a nada, con confianza en sí, se puede lograr todo (en el dominio de las cosas razonables, por supuesto).
Usted toma confianza y entonces la confianza le da la certeza de que usted es capaz de hacer no solo bien, sino muy bien todas las cosas que desea hacer, con la única condición de que sean razonables, tanto como es razonable su deber de hacerlas. Entonces cuando tenga que realizar algo, piense siempre que esa cosa es fácil
Que las palabras: “difícil”, “imposible”, “yo no puedo”, “es más fuerte que yo”, “no puedo impedirme tal o cual cosas...”; desaparezcan de su vocabulario, lo que sí debe existir en su lengua maternal, o en la lengua en que diario se expresa es, “es fácil, yo puedo”.



Si quieren conocer con más detalle el método de sugestión del Dr. Coue, pueden consultar su libro titulado, "El Dominio de sí Mismo"

No hay comentarios.:

Publicar un comentario