La
riqueza de un país depende de la prosperidad de sus ciudadanos, no se puede
considerar próspera a una nación donde la mayoría vive en la pobreza y solo
unos pocos son dueños de los recursos; la falta de empleo y los trabajos mal
pagados solamente originan una economía raquítica y una distribución injusta de
la riqueza.
Antes de tratar sobre la forma de lograr el éxito financiero, vamos a hablar un poco sobre la distribución de la riqueza en un país.
Hasta el año 2012, en México, había 54 millones de pobres, de acuerdo con Centro de Análisis Multidisciplinario de la UNAM, esto es casi la mitad de la población del país, algo que no ha cambiado mucho, pues en el 2020 la cifra, según datos del CONEVAL, era de 55.7 millones; pero también tenemos al hombre que pelea los primeros lugares como el más rico del mundo; que contrastes
En la economía de un país, la riqueza fluye siempre de
manera sencilla y lógica, de hecho, cada uno de nosotros hacemos
que la riqueza se concentre en unos cuantos, pensemos en alguna marca
reconocida, la que quieran, bebidas, botanas, ropa deportiva, telefonía,
electrónica, etc., cuando compramos sus productos y los preferimos sobre los
de otra marca, estamos concentrando mayor riqueza en esa empresa y le damos
cada vez más fuerza para que domine el mercado y nos imponga sus precios y
condiciones, entonces; porque no racionalizamos nuestras compras y tratar de adquirir
algunas marcas que son de su competencia, esto sería una forma de modificar la
concentración de la riqueza, haciendo que haya un mayor número de empresas con
recursos para promover la generación de empleos y la competencia.
Si tenemos la fortuna de tener un negocio, hagamos lo
posible por pagar buenos sueldos, por dar un buen servicio, por hacer crecer el
negocio y contratar personal adicional; vamos a repartir la utilidad que
obtengamos en 4 partes iguales; una de ellas para el negocio mismo, para que
siga creciendo, otra para el dueño del negocio, como recompensa por la
inversión de su capital, otra para los empleados como reconocimiento al
esfuerzo y buen servicio que realizan; y la restante para los clientes, como
agradecimiento por su fidelidad al negocio y preferir nuestros productos.
Esta podría ser una buena forma de iniciar con un reparto
más justo de la riqueza que circula en la economía de un país; y depende
exclusivamente de nosotros.
Ahora vamos a ver un poco lo que sucede en la economía de
nuestras familias. Si consideramos al dinero como unidad de medida del éxito
financiero, existen muchas personas que con el tiempo logran alcanzarlo. ¿En
qué se diferencian de nosotros?, tenemos los mismos sueños, los mismos deseos
de superación, algunos de ellos fueron, inclusive, compañeros nuestros en la
escuela o en el trabajo, iniciamos igual que ellos, con los mismos
conocimientos y oportunidades; aparentemente nunca fueron más inteligentes ni
se esforzaron más que nosotros, y sin embargo ellos lograron el éxito y nosotros
seguimos igual; ¿hay algo que saben ellos y que nosotros desconocemos; es cuestión solo de suerte, o hay algo más?
Cuando vemos que suceden cosas buenas en las vidas de
otras personas quisiéramos saber que técnica usaron, nos sentimos admirados de su
éxito, o deseamos tener la buena suerte que parece que siempre los acompaña. ¿Cuántos de nosotros seguimos esperando hacernos
millonarios a través de la lotería, los pronósticos deportivos, el melate, o
apostando en juegos de azar?
La obtención de la riqueza y su acumulación no es un tema
de suerte o de casualidad; como casi en todo, existen algunos principios básicos
que si se siguen aseguran el éxito financiero.
La persona que no sigue estos principios y no controla
sus deseos, gasta demasiado, se llena de deudas y vive esclavizada, trabajando
casi exclusivamente para cubrir sus adeudos. Los bancos y algunas tiendas
departamentales son la versión moderna de las tiendas de raya anteriores a la
revolución mexicana, donde se vivía como esclavo y se trabajaba solo para
cubrir parte de los intereses de la deuda que se tenía con ellos, lo mismo
sucede ahora a través de las tarjetas de crédito. Tal vez suena exagerado, pero
si nuestras
deudas nos dejan solo lo suficiente para pagar un lugar donde vivir, ropa,
transporte y comida, ¡algo estamos
haciendo mal!; aparte de la libertad que tenemos; ¿en que nos
diferenciamos de los esclavos de la antigüedad?; también ellos trabajaban todo
el día y tenían casi las mismas cosas. La manera más tonta de vivir en la sociedad
actual es trabajar solo para que al recibir nuestro sueldo tengamos que
destinar la mayor parte a pagar las deudas adquiridas mediante tarjetas de
crédito de bancos y tiendas departamentales; somos prácticamente sus esclavos,
estamos trabajando para ellos.
La riqueza fluye por diferentes caminos y uno de ellos es
el ahorro
Antes que nada, sin excepción, reserva por lo menos un 10% de tus
ingresos en cada pago que recibas, semanal, quincenal, o
mensualmente; este será el inicio de tu éxito financiero; trabajas todo el año
para pagar por tu vivienda, tu ropa, tu transporte, tu comida, etc., ¿y cuánto
queda para ti?, después de separar el 10%, destina el 20% para pagar tus deudas
y con el otro 70% organízate y cubre tus gastos y los de tu familia, no compres más
de lo que puedas pagar.
El hábito del ahorro nos permitirá contar con fondos suficientes
para afrontar cualquier tipo de gasto imprevisto sin recurrir al endeudamiento.
Controlar nuestros gastos hace que la riqueza se quede
con nosotros, nunca gastes más del 70% de tus ingresos.
Normalmente adaptamos nuestro nivel de gastos a los
ingresos que recibimos; si recibimos un pago adicional o un incremento de
sueldo, también incrementamos nuestros gastos; esto no debe ser así, debemos
limitarnos a lo necesario para estar en posibilidades de incrementar nuestro
patrimonio; para esto podemos apoyarnos elaborando un registro detallado de
nuestros gastos mensuales, de esta forma contaremos con la información
necesaria para poder definir si podemos ahorrar un % mayor; nuestro detalle de
gastos debe hacer una separación por tipo de gasto (frutas y
verduras-carnes-lácteos-refrescos-botanas-dulces y
galletas-ropa-zapatos-cigarros-bebidas alcohólicas-medicinas-renta-gasolina-transporte-deudas-etc.)
Con esta información determinamos que gastos podemos
eliminar sin dejar de cubrir nuestras necesidades básicas. Probemos eliminando
completamente los gastos en bares y restaurantes, los refrescos, pasteles,
botanas, dulces, chocolates, helados galletas, cigarros y bebidas alcohólicas.
Para los gastos en regalos vamos a obsequiar cosas que no sean costosas, por
ejemplo libros y películas; para los niños algún juego de mesa
(rompecabezas-memoramas-ajedrez) estos no son tan costosos y además les ayudan
en el desarrollo de sus habilidades.
Aprende a decir no, tenemos que educar nuestro carácter para ser capaces de
controlar nuestros deseos, y en ocasiones los de las personas que dependen de
nosotros, para no caer en la tentación de comprar algo que puede acarrearnos
mayores deudas, o impedir nuestro ahorro del 10% de nuestros ingresos solo
porque nos gusta, está de moda, está de oferta, o tiene meses sin intereses.
No pagues rentas, en lugar de esto podemos evaluar adquirir una casa,
aunque sea a crédito, si las cantidades que pagaremos por el crédito son
similares a lo que pagamos de renta, no estaremos gastando mucho más de lo que
ya gastamos y estaremos invirtiendo en algo que será nuestro.
Planea tus compras, si tenemos pensado comprar algún bien que consideramos
necesario, no nos apresuremos, vamos a planear el mejor tiempo para hacerlo; en
el caso de un auto, cuando ya se acerca la presentación de los nuevos modelos,
las compañías automotrices empiezan a ofrecer descuentos y promociones en los
modelos del año actual; si vamos a comprar algún electrodoméstico, vamos
reservando el dinero para su adquisición y esperemos los periodos en que las tiendas
ofrecen descuentos adicionales, de esta forma nos saldrá más barato.
No pagues intereses, si ya tienes un problema de deudas, haz todo lo posible
por pagarlas y evita pagar intereses, o por lo menos busca la forma de
transferir tu deuda con alguien con quien pagues una tasa menor de interés; de
lo contrario estarás trabajando para aumentar la riqueza de otros; utiliza las
tarjetas de crédito solo como un medio de pago y nunca de financiamiento, paga
cada mes el saldo total de tu estado de cuenta de modo que no tengas más costos
que la cuota anual; recuerda que los pagos destinados a tus deudas no deben
rebasar el 20% de tus ingresos.
Si pides dinero prestado, primero asegúrate de que lo vas
a poner a trabajar y que los rendimientos que genere sean suficientes como para
pagar el préstamo y dejarte beneficios.
Haz que el dinero trabaje para ti; el 10% que ahorras
debe producirte beneficios.
Que tu dinero produzca rendimientos, inviértelo en algo seguro, no lo prestes, no lo
arriesgues y no te dejes llevar por promesas de grandes ganancias en poco
tiempo, esto normalmente no existe, tampoco inviertas en algo que no conoces,
antes de arriesgarte asesórate con expertos sobre el tipo de inversión que
deseas realizar, ten cuidado, pues hay muchas personas y empresas tratando de
atraer la riqueza hacia sus propios bolsillos.
Invierte en un banco, las cantidades que vayas ahorrando ponlas a trabajar de
modo que te generen intereses y reinvierte también estos intereses, de esta forma
tu inversión seguirá creciendo; busca el banco que de la tasa de interés más
alta
Invierte en un fondo de inversión, de los que manejan bancos y casas de bolsa, pero antes solicita información
a algún asesor sobre los rendimientos que ha generado en los años anteriores,
trata de combinar rendimiento con seguridad, verifica si la casa de bolsa cobra
alguna comisión por el manejo de los fondos.
Invierte en acciones, si decides tomar mayores riesgos por la posibilidad de
conseguir mayores rendimientos, puedes invertir en acciones, pero antes
asesórate con algún experto, dale seguimiento al rendimiento de las acciones que
pretendes comprar durante 3 meses, por lo menos, revisa la información
histórica y las noticias sobre las empresas que te interesen y considera
siempre que la inversión en acciones es a largo plazo.
Crea un negocio, si el importe que ya tienes ahorrado te permite invertir
en algún negocio, antes de iniciarlo prepárate adecuadamente, consigue toda la
información que puedas sobre el tipo de negocio que te interesa, pregúntale a
los expertos; si deseas iniciar una panadería, no le preguntes a tu amigo que trabaja
como empleado en alguna oficina, o a alguien que trabaja como herrero;
pregúntale a quien tiene un negocio igual al que deseas; ten cuidado con las opiniones
de amigos y familiares, pues encontrarás mucha gente que te dirá que tal
negocio no funciona aunque no tengan ni idea sobre lo que funciona o no de ese
negocio.; y sobre todo, nunca inicies un negocio sin haber elaborado el plan del
negocio, esto te asegura que consideraste todas las situaciones
antes de iniciarlo. Si deseas adquirir una franquicia, analízalo bien, puede
ser una opción más segura si la marca es reconocida, pero el esquema de estos
negocios hace que en ocasiones trabajes casi exclusivamente para enriquecerlos
a ellos. Cuando el negocio esté en funcionamiento trata de aplicar la regla de
repartir la utilidad en 4 partes iguales.
Protege a tu familia y a tu patrimonio
Contrata un seguro, para tu casa y tu auto, para ti un seguro de vida y para tu familia uno de gastos médicos mayores; con esto proteges a tu familia en caso de que faltes y también te aseguras de no afectar tu patrimonio por algún gasto imprevisto, investiga las diferentes empresas aseguradoras si existen planes que incluyan todas estas coberturas, o si puedes encontrar alguna opción con beneficios similares.
Contrata un seguro, para tu casa y tu auto, para ti un seguro de vida y para tu familia uno de gastos médicos mayores; con esto proteges a tu familia en caso de que faltes y también te aseguras de no afectar tu patrimonio por algún gasto imprevisto, investiga las diferentes empresas aseguradoras si existen planes que incluyan todas estas coberturas, o si puedes encontrar alguna opción con beneficios similares.
Aumenta tus habilidades para adquirir riqueza
Toma algún diplomado que desarrollen tus habilidades, para lograr que la riqueza fluya hacia ti, no inviertas la mayor parte de tu tiempo en juegos de video y en estar siempre al pendiente de Facebook, de los personajes famosos, o de alguna otra tecnología similar, adquiere los conocimientos que te permitirán lograr el éxito financiero, ¿Cómo crees que invierten su tiempo las personas que logran atraer la riqueza? Actualmente no necesitas acudir a alguna universidad para adquirir conocimientos, existen alternativas en línea, libres de costo a través de las cuales puedes ir adquiriendo nuevos conocimientos; siempre es recomendable que sepas algo de contabilidad, administración ventas y mercadotecnia.
Toma algún diplomado que desarrollen tus habilidades, para lograr que la riqueza fluya hacia ti, no inviertas la mayor parte de tu tiempo en juegos de video y en estar siempre al pendiente de Facebook, de los personajes famosos, o de alguna otra tecnología similar, adquiere los conocimientos que te permitirán lograr el éxito financiero, ¿Cómo crees que invierten su tiempo las personas que logran atraer la riqueza? Actualmente no necesitas acudir a alguna universidad para adquirir conocimientos, existen alternativas en línea, libres de costo a través de las cuales puedes ir adquiriendo nuevos conocimientos; siempre es recomendable que sepas algo de contabilidad, administración ventas y mercadotecnia.
No dejes pasar las oportunidades
Si no trabajas en desarrollar tus habilidades ni en incrementar tu patrimonio, puede ser que se te presenten oportunidades de lograr incrementar tu riqueza y por no estar preparado, las pases por alto y no las aproveches, cuando las oportunidades llegan a nosotros debemos estar técnica y financieramente preparados y no dejarlas pasar, cuando estamos seguros de que una inversión va a tener buenos rendimientos debemos aprovecharla. No hay que dejar las cosas para después, si tenemos una buena idea, o identificamos una buena inversión, hay que aprovecharla, hay que tener la iniciativa, los conocimientos y los recursos necesarios para no dejarla pasar.
Si no trabajas en desarrollar tus habilidades ni en incrementar tu patrimonio, puede ser que se te presenten oportunidades de lograr incrementar tu riqueza y por no estar preparado, las pases por alto y no las aproveches, cuando las oportunidades llegan a nosotros debemos estar técnica y financieramente preparados y no dejarlas pasar, cuando estamos seguros de que una inversión va a tener buenos rendimientos debemos aprovecharla. No hay que dejar las cosas para después, si tenemos una buena idea, o identificamos una buena inversión, hay que aprovecharla, hay que tener la iniciativa, los conocimientos y los recursos necesarios para no dejarla pasar.
Hay muchas otras formas de hacer que la riqueza se quede
con nosotros y que vaya creciendo con el tiempo, pero estoy seguro de que si seguimos la mayoría de las que
aquí se presentan lograremos que parte de la riqueza que hoy transferimos a las empresas
y negocios a través de nuestras compras se quede con nosotros, trabaje para
nosotros y, con el tiempo, se incremente lo suficiente como para no depender
económicamente de nadie.
Si has terminado de
leer esto y todavía piensas que el éxito y la riqueza que logran otras personas
es solo cuestión de suerte y no de trabajo, sigue apostando al melate, la
lotería o los pronósticos deportivos, o aplicaciones de apuestas, pero no olvides que lo que se adquiere
sin ningún esfuerzo se pierde rápidamente.
¡Libera tu potencial!